miércoles, 19 de marzo de 2008

Análisis de la situación del VIH en el Batey 2006

Análisis de la situación del VIH
en el Batey 2006

Preparado por
Dr. Leonardo Martínez Abreu










Análisis de la situación del VIH
en el Batey


La prevalencia de VIH/SIDA y factores que influyen en el Batey.

Diversos estudios señalan la alta prevalencia de personas viviendo con el virus del Sida en los Bateyes Dominicanos, diferente factores se han señalados como influyentes en esta tasa de prevalencia en los bateyes, todos confluyen en que en esta poblacion existe una situación de vulnerabilidad sociodemográfica caracterizada en términos generales por:

Una población con un bajo nivel educativo,
Discriminada por razones de procedencia social,
Trabajadores con bajos salarios y trabajos altamente demandantes,
Lugar de residencia con altas condiciones de hacinamiento,
Un entorno predisponente a enfermedades.
A estas condiciones de vulnerabilidad socioeconómica se unen razones altamente asociadas al contagio y transmisión de ITS y VIH/SIDA como son: un nivel de conocimientos no asociados a prácticas preventivas, prácticas y comportamientos sexual de riesgo, actitudes desfavorables hacia las medidas preventivas, baja percepción de riesgo y un alto nivel movilidad intra y extrabateyana.

Conocimientos acerca del VIH en el Batey:

La mayoría de los estudios realizados en el ámbito nacional o en comunidades locales, nos señalan que en la República Dominicana existe un alto porcentaje de personas que conocen acerca de aspectos básicos del VIH.

Según el estudio de Yangüela en el 1999, el 95 % de las personas habitantes en el batey ha oído hablar del VIH[1] este porcentaje es ligeramente mayor al de Endesa[2] que estableció un 90 % y Mudha[3] para el 2004 sostiene que más de un 95 % de las personas residentes en bateyes ha oído hablar acerca del VIH.

En la encuesta actualización en VIH de la Ficha del Batey[4] se observaron informaciones similares, un 97 % de los entrevistados conoce detalles acerca de la enfermedad, su distribución, su forma de transmisión y por lo menos algún tipo de mecanismo para prevenirla.

En algunos de los estudios citados[5] se observa que un alto porcentaje de personas dicen conocer sobre VIH, pero que esto no ha sido suficiente para inducir a un comportamiento preventivo a través de aumentar su percepción de riesgo.
Por ello la encuesta actualización Ficha del Batey[6], intentó conocer si la cantidad de información recibida por las personas es suficiente para influir un cambio de comportamiento y midió la cantidad de conocimientos acerca del VIH, observándose los resultados presentados en el siguiente cuadro:
Distribución personas entrevistado/as
Según niveles de conocimientos acerca de ITS / VIH – SIDA.

Niveles Conocimientos ITS / VIH - SIDA
Frecuencia
Porcentajes



Suficientes

Insuficientes

Moderados

N/A
Total





522

26.1

479

23.9

993

49.6

8
2002

.4
100.0

Se observa que del 97 % de personas que señala tener conocimientos acerca del VIH sólo el 26.1 % poseía conocimientos suficientes.

Otros datos nos señalan la relación que existe entre el nivel de conocimientos calculados y los niveles de capacidad de sentirse en riesgo, observamos que a mayor nivel de conocimientos con respecto a VIH / SIDA mayor es la percepción de sentirse en riesgo de poder enfermar, cuando el nivel de conocimiento es insuficiente disminuye la percepción de sentirse en riesgo.

Distribución personas entrevistado/as
Según niveles de conocimientos acerca de ITS / VIH – SIDA y percepción de Riesgo.

Nivel de conocimientos / percepción de riesgo
Alta
Moderado
Baja


F

%

F

%

F

%

Suficientes

364

69.73

84

16.09

74

14.17

Insuficientes

65

13.56

123

25.68

291

60.75

Moderados

337

33.93

467

47.02

189

19.03

Totales

766

674

554


Estos resultados corroboran los hallazgos del estudio de Yangüela[7] en el 1999, que señala que a pesar de que más del 95 % de las personas conocían algo acerca del VIH, el 71 % señalaba no sentirse en riesgo.

Los resultados de Endesa 2002[8] y del estudio de Mudha 2004 señalan que el 60 % de los entrevistados tenía una baja percepción riesgo[9] (Mudha), y el 58 % manifiesta que no ha cambiado su comportamiento[10]. (Endesa)

Como dato de interés debemos señalar el hallazgo de Endesa 2002, acerca del conocimiento de las mujeres cobre la forma de prevención del VIH, Endesa[11] señala haber encontrado a un 15 % de mujeres que el VIH no se previene.





Asociacion del Conocimiento acerca del VIH con la Cultura Mágico Religiosa.

El 43 % de las personas entrevistadas en el estudio del Yangüela[12] asocia las vías de transmisión del VIH a vías de transmisión mágico religiosa (Yangüela), este fenómeno es refutado por López y De Moya[13], quienes citan a Blandino, quien en 1990 reportó como en estas comunidades existe una estructura de poder que incluye, entre otros, influyentes líderes carismáticos informales que trabajan con “misterios” (figuras chamánicas).

Este autor[14] también comprobó que en todos los bateyes estudiados existían cofradías o gagás, sociedades “secretas” de estructuración jerárquica que tienen carácter mágico-religioso y operan públicamente en Cuaresma. Pero que que el SIDA era entendido como una enfermedad natural, biológica, que no se podía “enviar” ni curar de manera sobrenatural, es decir, por intervención de “luases”, “seres” o “misterios” de la religión voduísta.


Expocision a actividades IEC:
En el estudio Actualización en VIH de la Ficha del Batey[15] se señala que solo un porcentaje de un 8 % señala nunca antes haber estado expuesto a campañas de IEC, y el 61.3 % ha estado expuesto a mas de 3 mensajes, debemos señalar que los bateyes incluidos en esta encuesta fueron objeto durante casi dos años de un programa de educación y prevención ejecutado por la Coalición Probateyes, las actividades de este proyecto podrían estar influenciando este resultado.

Distribución personas entrevistado/as
Según Niveles de Exposición a actividades IEC.

Exposición a Actividades IEC
Frecuencia
Porcentajes
N/A

No

Si

Total
8
.4

159

8

1835

92

2002

100.0




Distribución personas entrevistado/as
Según no. de exposiciones a actividades IEC.
Numero de Exposiciones
Frecuencia
Porcentajes


0

160

8.0

1
336
16.8

2
262
13.1

3
337
16.8

4
278
13.9

5
150
7.5

6
103
5.1

7
66
3.3

8
64
3.2

9
230
11.5

10
8
.4

Total
1994
99.6


El 36 % ha escuchado algún mensaje de prevención a través de la radio, del grupo que ve televisión solo el 26 % ha visto mensaje de prevención de VIH y del grupo que lee periódico ninguno ha observado campañas de prevención[16].



Comportamiento sexual

El comportamiento sexual de los residentes en los bateyes es de alto riesgo al VIH, según describen estudios recientes realizados en Bateyes de la Republica Dominicana
Comportamiento sexual

58 % tuvo su primera relación sexual entre 11 y 16 años (Mudha)
3.6 5% tuvo su primera relación sexual entre 7 y 10 años. (Mudha)
23 % sólo tuvo una pareja. (Mudha)
27.6 6% tuvo más de una pareja a la vez. (Mudha)
33.8 % parejas comerciales.
46.5 % de relaciones por dinero no uso de condón.


Actividad sexual:

Los habitantes de los bateyes mantienen una gran actividad sexual, el estudio del CESDEM en los bateyes sobre conocimientos, creencias, actitudes y prácticas referidas a la salud sexual y al VIH/SIDA[17], establece que el 88.3% de los hombres y la mujeres entre 14 y 42 años son sexualmente activos, sin encontrarse diferencia significativa por sexo.

En actualización en VIH de la Ficha del Batey[18]. los datos nos señalan que el 99.7 % de los entrevistados había tenido sexo en los seis meses previos a la entrevista, y en la investigación de Mudha[19]. el 65 % de los entrevistados había tenido sexo en el ultimo mes, este estudio revela que el 54 % de los entrevistados tuvo más de 3 actividades sexuales en ese periodo.

Edad de inicio de las Relaciones Cóitales:
En ENDESA 2002[20], se encuentra que el 46.3 % inició su vida sexual antes de los 15 años de edad, con un 34.8 % de los residentes en el batey que ha tenido relaciones sexuales antes de los 14 años y el 67.9 antes de los 16. [21], En la investigación de Mudha[22] se señala que cerca del 26 % de las mujeres del batey tuvo su primera relación coital antes de cumplir los 12 años de edad. Estas edades son inferiores a la media nacional que según algunas investigaron es de 16 años[23] (Endesa 2002)

Número de parejas:

El número de parejas sexuales se ha considerado como uno de los factores que benefician la infección por el VIH, las personas residentes en los bateyes sostienen un alto nivel de promiscuidad sexual, según la investigación de Probateyes el 21 % de las relaciones cóitales se sostuvieron con parejas que no eran la habitual y que de éstas el 36 % fueron sin protección preventiva.

En la investigación realizada por el Movimiento de Mujeres Dominico Haitianas, MUDHA[24] el 27.6 % de los entrevistados manifestó que ha tenido relaciones sexuales con más de una pareja a la vez, el 12.3 % de hombres tienen mas de una pareja fija, el 54.7 % tuvo sexo con más de 2 parejas en el ultimo año Y señala además que el 33.8 % tuvo sexo por dinero en los últimos 2 meses.

Uso del Condón
Según el estudio de Probateyes[25] de las personas que tienen parejas habituales sólo el 3 % reportó uso del condón en sus relaciones sexuales intra hogar, en Endesa 2002[26], sólo el 13% de los hombres y el 2.9% de las mujeres reporta haber usado el condón en sus relaciones sexuales en los últimos tres meses. Endesa[27] señala también que el 91.5 % de mujeres nunca ha utilizado condón. (Endesa)


La investigación Actualización de la Ficha del Batey[28] revela que un 39 % de los pobladores de los bateyes no utiliza condones en relaciones fuera de su pareja habitual y un 97 % no utiliza condones con su pareja habitual.

En el estudio de Mudha[29] el 33.8 % tuvo sexo por dinero en los últimos 2 meses y de éstos el 46.5 % no usó condón en esa relación.

En el cuadro siguiente se resumen los porcentajes de personas en actividad sexual que utilizan el condón.

Distribución de la población según uso del condón

Por ciento

No contesta
12.5

Si
49.5

No
38.1
Total
100.0
Fuente: Entrevistas a pobladores de bateyes.


La gran mayoría de la población en los bateyes sabe identificar un condón (95.1%), y muestra una disposición favorable a usarlos en todas sus relaciones sexuales, (70% de los hombres; 32.6% de las mujeres[30] según muestra la encuesta Endesa 2002[31]. Sin embargo, el mismo estudio y sus resultados en cuanto al uso del condón, sugieren que es alto el grado de desconocimiento sobre cómo usarlo: el 26.3% de los hombres, y el 55.4% de las mujeres admite no saber cómo hacerlo [32].

En el siguiente cuadro se resume una encuesta realizada en 15 bateyes, por la Red Jack Viau acerca de si la persona sabe que el condón puede prevenir la transmisión del VIH.

El Condón puede prevenir la transmisión del VIH
Frecuencia
Por ciento

Si
497
79.7

No
125
20.1
Total
622
100.0


Relaciones Sexuales de Riesgo
Conocer la existencia de algún medio de prevención no ha sido impactante en el cambio de comportamiento que se espera sea operado en las personas intervenidas, se afirma esto cuando se observa que un 15 % de las mujeres de los bateyes señala que el VIH no tiene forma de prevenirse [33].

En actualización Ficha del Batey[34] se investigó acerca de las relaciones sexulaes de mayor riesgo, calculándose un porcentaje (14.5 %) de importancia de personas con relaciones sexuales anales, de éstos sólo el 21 % dice utilizar condones en todas sus relaciones. En esta misma encuesta[35] el 3.1 % de los hombres entrevistados manifestó tener actividad homosexual, sólo el 10 % de éstos utiliza el condon.

En lo relativo a sexo por dinero en la encuesta citada, el 3.3 % de las personas, (hombres y mujeres) entrevistadas manifestó tener actividad sexual por dinero, de estos solo el 33.11 % manifestó que utiliza el condon en todas estas relaciones.
Factores por las que no usan el Condón.
El siguiente cuadro resume los elementos señalados como factores para no usar el condón en las diferentes investigaciones citadas:
Factores
%
Investigación
Me disminuye el placer
29 %
Actualización Ficha del Batey[36]
Mi pareja es de confianza.
31 %
Actualización Ficha del Batey, Investigación Mudha[37]
Cuando uno se va a infectar pasa como quiera.
15 %
Actualización Ficha del Batey
A veces no da tiempo a buscarlo
7 %
Actualización Ficha del Batey
No asocia formas de prevención a infección
15 %
Endesa 2002[38]
Miedo a que se rompa
11 %
Actualización Ficha del Batey

Acceso a Condones:

En el siguiente cuadro observamos los lugares señalados[39] por habitantes de los bateyes para adquirir sus condones;

Distribución de la población según lugares en donde compra condones


Por ciento

No contesta
26.2

En un negocio en el batey
13.1

En un negocio fuera del batey
11.1

Al promotor del batey
27.9

En la clínica del batey
10.5

No sabe en donde comprarlo
11.3
Total
100.0
Fuente: Entrevistas a pobladores de bateyes.

Los datos relativos al tipo de actividad sexual que realizan y la frecuencia de parejas no habituales, de parejas por dinero, el no uso de preservativo con esas parejas y la percepción de haber tenido sexo con alguna persona infectada, nos permitió reescalar y clasificar el comportamiento sexual de riesgo en la investigación de Probateyes[40], los resultados se señalan a continuación



Distribución personas entrevistado/as
según comportamiento sexual de riesgo.

Comportamiento sexual de Riesgo
Frecuencia
Porcentajes
N/A


Muy alto riesgo

Riesgo moderado

Riesgo bajo

Total
8
.4


124


6.1

1863

93.1

7

.3

2002

100.0






Cuadro/grafico
Distribución personas entrevistado/as
Según niveles de comportamiento sexual y percepción de riesgo.

Comportamiento sexual / percepción de riesgo
Alta
Moderado
Baja


F

%

F

%

F

%

Muy alto riesgo

15

12.09

11

8.87

98

79.03

Riesgo moderado

647

34.73

978

52.5

238

12.77

Riesgo bajo

5

71.42

1

14.29

1

14.29

Totales

667

990

337


Al cruzar la valoración del comportamiento sexual con la percepción de sentirse en riesgos, observamos que a medida que el entrevistado se percibe con mayor riesgo de infectarse, disminuye su comportamiento sexual de riesgo[41].

Se observa también en el estudio de Yangüela[42] en el 1999, que a pesar de que más del 95 % de las personas conocían algo acerca del VIH, el 71 % señalaba no sentirse en riesgo, según Endesa 2002[43], y según Mudha[44] el 60 % tenia una baja percepción riesgo[45], en Endesa[46] también encontramos que el 58 % manifiesta que no ha cambiado su comportamiento[47],.


Pruebas voluntarias, consejería pre y post prueba, acceso y disponibilidad.


En la encuesta Actualización en VIH de la Ficha del Batey, realizada por Martínez[48] para Probateyes, el 83 % de los entrevistados manifestó conocer algún lugar en donde se realizan pruebas de VIH y el 61 % conoce de lugares en donde se realizan consejerías y a pesar de que más de la mitad de los entrevistados se había realizado la prueba del VIH, sólo el 61 % había recibido consejería pre prueba y el 11 % consejería post prueba[49].

El 85.3 % señala saber de algún lugar en donde se realiza la prueba, de éstos el 54.5% señala que el lugar en donde se realizan las pruebas es en el Hospital[50].

En los bateyes no existen disponibilidades instaladas para que los residentes se puedan realizar una prueba informada y consentida de VIH, las acciones de las ONGS en proyectos de prevención han facilitado que este porcentaje logre acceder a este servicio[51]

Muchas organizaciones disponen de servicios de salud en las comunidades, carecen de los servicios de Apoyo y Consejería, el 95.4 % de las pruebas de VIH se realizan careciendo el sujeto de las debidas secciones de consejería pre y post-prueba, el acceso a tratamiento tanto paliativo como antiretrovirales a través de estas organizaciones no existe[52].

Por otro lado en la investigación de MUDHA[53] el 54.5 % de los entrevistados se había realizado pruebas de VIH, de este porcentaje el 79.5 % la realizó por indicación médica, el 18.9 % por razones de trabajo, el 15.5 % por sospecha de estar infectado. Solo el 46.6% recibió orientación pre prueba.

En el estudio de Probateyes[54] el porcentaje de personas que recibio consejeria es mayor (61 %), esto obedece a que en los lugares de la investigacion de probateyes existen programas comunitarios de prevencion y promocion de la prueba voluntaria, aun asi las consejerias post prueba solo fueron recibida por el 11 %.

El 85 % de los entrevistados[55] señala sus deseos y disposición de realizarse pruebas voluntarias si éstas están disponibles, de este porcentaje el 75.6 % desea realizarse la prueba porque desea saber si está infectado, el 6.8 % por que duda de su pareja y el 2 % porque se siente enfermo.


El 85.3 % señala saber de algún lugar en donde se realiza la prueba de éstos, el 54.5 % señala que el lugar en donde se realizan las pruebas es en el Hospital, debemos señalar datos del estudio de Aprodema en el que el 69.8 % de los residentes en los bateyes nunca ha visitado un hospital público por temor al rechazo y la percepción de que se le discrimina[56].

Estudios Sero epidemiológicos

Desde el 1985 se han realizado diversos estudios acerca de la prevalencia de VIH en el Batey, en el siguiente cuadro tomado de Rutas Migratorias[57] se presentan los datos de los estudios de seroprevalencia del VIH realizados en obreros agrícolas cortadores de caña de azúcar, especialmente en población haitiana y se amplía con las informaciones reportadas por Endesa 2002[58],.
Este cuadro resume cronológicamente la prevalencia de VIH y señala una prevalencia mínima de un 1.5 % hasta una máxima de un 6 % en población total y un 15 % en la población de nacidos en Haití.

Estudios seroepidemiológicos del VIH en colonias agrícolas azucareras (bateyes) en República Dominicana (1986-2002).

Autor y año
Lugar
VIH+/N
Prevalencia VIH (%)
Guerrero et al., 1985
Puestos aduanales fronterizos con Haití
30/1,000
3.0
Martínez et al., 1986
Cortadores de caña haitianos, Monte Plata y San Pedro de Macorís
15/500
3.0
Acra, 1987
Cortadores de caña haitianos, Hato Mayor
3/200
1.5
Pérez et al., 1987
Cortadores de caña haitianos, Batey A. Bass, San Pedro de Macorís
4/87
4.6
Melgen et al., 1988
Cortadores de caña dominicanos y haitianos, Los Jobillos, Yamasá
7/186
3.8
Guerrero R. et al., 1991
Cortadores de caña haitianos, Barahona
6/100
6.0
Capellán, 1992
Cortadores de caña haitianos y dominico - haitianos, Haina
N~300
Migrantes Haitianos recientes (<1 año), 5.0%; “Arrayanos”, 10.0%; Residentes Haitianos, 15.0%
Brewer et al., 1996
Mujeres haitianas, San Pedro de Macorís
29/500
5.7% (total); <35 años: 8.8%
CESDEM 2002
Población en edad sexual bateyes
N=
5 %

Grupos afectados por el VIH en el Batey:

Mujeres:

En la República Dominicana el patrón de transmisión de la enfermedad más frecuente es el heterosexual, con una mayor frecuencia de infección en personas en edades reproductivas (15-45 años) y una razón anual de casos hombre mujer que pasó de 2:1 en el 1987 a 1.2:1 en los últimos años. Los datos de vigilancia centinela señalan que la prevalencia de VIH en mujeres embarazadas varió entre 0.5% en 1991 a 4.0% en 2001. Las informaciones suministrada por Copresida[59] para ese año, señalaban una prevalencia de un 1 % en mujeres embarazadas.

En los bateyes se observa una prevalencia (5.2% ) ligeramente mayor en las mujeres que en los hombres (4.8%), estos datos según Endesa 2002[60] hacen diferente los bateyes de la realidad nacional.

Un informe de Probateyes[61] señala que la mayoría de infectados por el VIH (53 %) son mujeres, los fallecidos a causa del VIH en los bateyes tambien son en su mayoria mujeres, esto se ha asociado al nivel de acceso a servicios, condiciones socioeconómicas, el desarrollo psicosocial y afectivo y al comportamiento sexual y cultural del grupo.

Un estudio realizado en el 2005 por Martínez[62], señala que de las mujeres residentes en el Batey que ingresaron al Programa Nacional de la Transmisión Vertical en ese año el 14 % desertó de una de las fases de este programa alegando razones como la lejanía para buscar los insumos lácteos y medicamentos, la no disponibilidad de recursos para costearse los pasajes y la percepción de que se le discrimina.

Niños, Niñas y adolescentes huérfanos por el VIH en los Bateyes


UNICEF y PROINFANCIA, revelaron en el 2004 un estudio realizado en dos provincias de la República Dominicana en que señalan la existencia de 121 casos de niños y niñas huérfano/as a causa de la muerte de los padres por el VIH[63].

Los resultados aportados por el Plan especial de Captación de Beneficiarios ejecutado en el marco del proyecto Conectando los Bateyes que ejecuta la Coalición Probateyes, revela la existencia de 626 niños y niñas huérfanas y vulnerables por el VIH[64] (Martínez, 2006), que se corresponde con el 6 % de la población en esas edades residentes en los bateyes intervenidos.

Se ha comprobado que la pérdida de los padres y madres influye en el desarrollo de un entorno de poco apoyo a los huérfanos, la negación de apoyo psicosocial adecuado y los límites al acceso de servicios básicos como la salud y la educación.

Otra de las implicaciones asociadas a la orfandad por VIH es el poco acceso de éstos a una nutrición adecuada, a servicios sociales en base a igualdad con otros niños; se ha evidenciado mayor frecuencia de maltrato, violencia, explotación, discriminación, tráfico y pérdida de herencia.



Hombres Adultos.

Endesa 2002[65] plantea que la prevalencia de VIH en hombres del batey es de un 4.8% con un pico estadístico en hombres en edades de 40-44 años que llega hasta un 12%, para esta prevalencia en ese grupo se aluden razones de corte cultural como el machismo y laborales como el trabajo sexual y en zonas de alto interés turístico.

Informaciones fenomenológicas señala que 10 % hombres usa siempre el condón, sólo el 38 % de los hombres residentes en el batey se han realizado pruebas de VIH contra un 58 % de las mujeres, y sólo el 10 % manifiesta utilizar el condón en todas las ocasiones sexuales[66], en el estudio de Mudha[67] se reporta que el 58 % de los hombres manifiesta que no ha cambiado su comportamiento.

El citado informe de Probateyes[68] reveló que en 35 bateyes habían unos102 casos de Personas con el VIH de los cuales 48 (47 %) casos eran hombres, de estos 23 (48 %) fallecieron en el último año.

Familiares.

Los familiares de personas viviendo con el VIH o que hayan fallecidos a causa de esta enfermedad se convierten en un grupo con una vulnerabilidad especial, el nivel de discriminación a causa de prejuicios culturales, la negación de servicios esenciales, el nivel de lesión psicológica y emocional y en algunos casos el daño socioeconómico que deja la perdida del familiar le dan esta categoría, en el informe del Programa especial se reporta la existencia de unas 821 ( 7 %) personas afectadas en los 35 bateyes del proyecto[69].


Personas Viviendo con el VIH en el Batey.

A partir de Endesa 2002[70], la prevalencia de VIH en el batey es de un 5 %, una inferencia de esta información nos llevaría a cifras absolutas de unas 10,000 personas que actualmente viven con el virus del VIH en los bateyes.

En la Investigación Actualización de la Ficha del Batey[71], 1105 personas reportan que se habían realizado pruebas de VIH y de éstos que se realizaron pruebas el 2.81% señala haber obtenido un resultado positivo, a pesar de que este dato no se puede comparar con los que nos señalan una prevalencia mayor en el Batey, pues en este caso se trató solamente de personas que de manera voluntaria señalaron su seropositividad, es indicador de que algún tipo de cambio ha habido en la prevalencia de VIH en el Batey.

Las cifras reportadas en el informe de la jornada especial de captación realizada por la Coalición Probateyes[72] que ejecuta esta coalición en 35 bateyes de la República Dominicana señalan que unas 102 personas fueron identificadas como positivas.
Batey
PVVS Vivos
Infectados Fallecidos
San Isidro
0

Hato Viejo
2
1
Yabacao
3
2
Redonda
2

Naranjo
4
2
San Luís
54
10
Mamey
2
0
Mojarra
2
4
Monserrat
1
0
Pueblo Nuevo
0
0
Guayabal
0
1
Los Santana
0
2
La jengibre
0
4
Victorina
0
2
Ermita Blanco
0
0
Totales
0
9
Gonzalo
10
4
Batey Nuevo
1
0
Tarana
0
0
Construcción
0
0
Carmona
0
0
Guanuma
4
2
Bermejo
0
1
La Luisa
0
0
La Jagua
3
0
Triple Ozama
2
0
Esperanza
2
2
Batey el Soco
9
1
Jaguar
1
1
Alemán
1
1
Monte Cristy
0
3
Santa Fe
0
4
Boca del Soco
0
1
Jalonga
0
13
Margarita
0
10
Alejandro Bass
1
1
Totales
102
84


Un diagnostico fenomenológico de los/as PVVS en el batey nos segmenta esta población en grupos diferenciados para su intervención, estos grupos son:

a. Infectados que hacen vida habitual en el batey y cuya condición es conocida por todos, no tienen ningún tipo de restricción en brindar informaciones acerca de su estado y en la mayoría de los casos había contactado y comunicado de manera directa su condición al promotor o al personal de salud de las ONGS.
b. Un grupo cuya condición solo se la había comunicado al personal de salud y promotores de las ONGS
c. Otro grupo cuya condición se la había informado al personal de salud de las ONGS y / o al personal de salud de su entorno, en algunos casos en tratamiento antiretroviral.
d. Un grupo que había comunicado su situación de infectados a familiares y éstos se la habían confiado al promotor y/o al personal de salud.
e. Un grupo que no le había comunicado de su infección a nadie.
f. Un grupo cuya condición no era conocida por él, pero sí por familiares
g. Un grupo que nadie, ni él conocía de la infección.
h. Un extenso grupo que deseaba tener acceso a pruebas voluntarias.








Vulnerabilidad de los/as PVVS y NHV y acceso a servicios en el Batey.

A las condiciones de vulnerabilidad de las personas residentes en el batey se añaden las condiciones de ser seropositivo, familiar de un infectado o hijo/a de algún infectado o fallecido por el VIH. El alto nivel de estigma de vecinos, proveedores de servicios, maestros y otras personalidades afecta de manera sensible a estos grupos y son causa de frecuente discriminación.

Los residentes de los bateyes tienen un menor acceso a servicios básicos como son la salud y la educación, en el caso de la salud, éste se limita en la mayoría de los casos a la oferta de los establecimientos de Organizaciones No Gubernamentales (ONG,s) permitidas por el Estado Dominicano y admitidas por el sistema de salud sin embargo estas organizaciones tienen limitaciones que no le permiten brindar los servicios necesarios a las personas que viven con el VIH, las cuales en la mayoría de los casos deben resignarse a esperar el agravamiento de la enfermedad o morir y otros recurren al uso de preparaciones y tomas caseras[73].

Según el estudio Bateyes del Estado de Argelia Yangüela[74], sólo el 25 % de los pobladores de los bateyes tiene acceso a servicios de salud del Estado Dominicano y de estos el 80 % manifiesta menor acceso por razones de transporte y distancia. Este estudio señala que el 16 % de los bateyes no tiene ninguna fuente de servicios de salud y que el 10.9 % de los pobladores del batey tiene al curandero como única fuente de acceder a servicios sanitarios.

El siguiente cuadro diseñado en Rutas Migratorias de López y De Moya[75], lo hemos tomado como base para presentar de manera sucinta la situación de los Derechos humanos de las personas VIH positiva que residen en el batey, se han realizado algunas actualizaciones

Situación de los Derechos Humanos de los habitantes del batey VIH Positivos/as.
Derechos Humanos
Situación de los/as habitantes del batey que Viven con VIH/SIDA
Derecho a la no-discriminación y la igualdad ante la ley.
La indocumentación contribuye a aumentar su marginalidad y vulnerabilidad en el contexto del status VIH positivo, por distanciamiento de ambientes favorables al cambio conductual y al manejo del VIH/SIDA. Cualquier contacto con autoridades formales (policiales, militares, legales, sanitarias) conlleva un cierto riesgo de deportación. Por esta razón, los/as inmigrantes y sus descendientes VIH positivos no pueden exigir su derecho a la no-discriminación y a la igualdad ante la ley. En los últimos años un grupo de organizaciones organizadas en la Red de Encuentros Dominico Haitianos (Jack Viau) a asumido algunas posturas de defensa de los Derechos Humanos.
Derechos humanos de las mujeres.
Los derechos sexuales y reproductivos (salud física y mental, educación, información) no son extendidos a las mujeres inmigrantes haitianas y sus descendientes. Informantes claves indicaron que muchas de ellas son engañadas, chantajeadas o violadas al intentar cruzar la frontera, o al repatriarlas. Hay un acceso disminuido a pruebas de VIH y en mayor frecuencia estas no reciben las debidas consejerias establecidas por la ley.
El tamizaje del VIH en las embarazadas no va acompañado de un empoderamiento a través de la educación en kreyole para prevenir la transmisión perinatal, la mayoría de las mujeres desertan del Programa Nacional de la Transmisión Vertical por barreras económicas o sociales.
Derechos humanos de los niños/as.
Los/as niños/as de uno o ambos padres haitianos nacidos en el país son dominicanos constitucionalmente, pero se les niega la partida de nacimiento que los acredite como tales. No se les provee información para protegerse de la infección por VIH o para conocer y lidiar con su status, si estuvieran infectados. No existe protección en caso de orfandad por VIH u otra condición
Derecho a la privacidad.
La vida privada en los bateyes es un bien escaso, ya que los/as vecinos/as tienden a compartir las intimidades de cada cual. Aunque sólo uno de los casos reportó conocer su condición de VIH positivo, los/as vecinos/as sospechaban o conocían esa condición, en función de la ausencia del trabajo, la muerte del cónyuge en condiciones similares, o los propios síntomas.
Derecho a disfrutar los beneficios del progreso científico y su aplicación.
No se provee acceso a terapias antiretrovirales o paliativas a la población residente en los bateyes.
Derecho a alcanzar al mayor nivel de salud física y mental.
No existen condiciones que aseguren servicios y atención médica a los enfermos. Los servicios se encuentran a gran distancia de los bateyes agrícolas,. La provisión de información, educación y apoyo relacionados con VIH/SIDA es escasa y difusa, el acceso a tratamiento por enfermedades de transmisión sexual y antiretrovirales es restringido, no existen servicios de consejería ni de pruebas voluntarias. Personas VIH positivas son discriminadas en ambientes sanitarios en base a su status, negándoseles la atención. Miles de personas son estigmatizadas aun sin estar infectadas.
Derecho a un adecuado nivel de vida y servicios de seguridad social.
No se cumple el derecho a la alimentación, vivienda, vestido, atención médica y servicios sociales necesarios, ni a la seguridad en caso de desempleo, enfermedad, incapacidad, viudez, envejecimiento, entre otras. No se da trato diferencial a las personas VIH positivas como es debido.
Derecho al trabajo.
No se asegura que a una persona VIH positiva o con SIDA, después de conocido su status, se le permita trabajar mientras pueda desempeñar las funciones de su trabajo.













[1] Tejeda Yangüela: Bateyes del Estado, Encuesta Socioeconómica y de salud de la población Materno Infantil de los Bateyes Agrícolas del CEA, Rep. Dom. USAID, Dic. 1999.
[2]CESDEM, Estudio Demográfico y de Salud. 2002
[3] Mudha: Incidencia de las políticas publicas y actitudes de la población en edad reproductiva de las comunidades bateyanas en relación al VIH/SIDA, Mudha, Garr, 2005.
[4] Martínez, Leonardo: Actualización Ficha del Batey, 2005
[5]MUDHA,. 2005
[6] Idem 2005
[7] Tejeda Yangüela: Op Cit. 1999.
[8]CESDEM,O P. Cit. 2002
[9]MUDHA, Op Cit . 2005
[10]idem. 2002
[11]Idem. 2002
[12] Tejeda Yangüela: Op Cit, 1999
[13]López, Irene, De Moya Antonio: Op Cit. 1999
.
[14]Idem
[15] Martínez, Leonardo: Actualización Ficha del Batey, 2005
[16] Martínez, Leonardo: Op cit 2005
[17] CESDEM, Op, Cit.
[18] idem
[19] Mudha, op cit, 2005
[20] CESDEM, Op, Cit.
[21] Copresida: Situación epidemiológica del VIH / SIDA en la República Dominicana, 1983 – Noviembre 2002.
[22] Mudha, op cit, 2005
[23] CESDEM, Op, Cit.
[24] Mudha, op cit, 2005
[25] Martínez, Leonardo: Op cit 2005
[26] CESDEM, Op, Cit.
[27] Idem
[28] Martínez, Leonardo: Op Cit.
[29] Mudha, op cit, 2005
[30]Idem.
[31] CESDEM, Op. Cit.
[32] Idem
[33] idem
[34] Martínez, Leonardo
[35] Idem
[36] Martínez, Op Cit, 2004
[37] Mudha, op cit 2004
[38]CESDEM, op cit 2002
[39] Idem
[40] Martínez, Leonardo: Ficha del Batey, 2004
[41] Martínez, Leonardo: Op cit, 2005
[42] Tejeda Yangüela: Bateyes del Estado, Encuesta Socioeconómica y de salud de la población Materno Infantil de los Bateyes Agrícolas del CEA, Rep. Dom. USAID, Dic. 1999.
[43] CESDEM, Op. Cit.
[44] Mudha, op cit 2004
[45] Idem
[46]idem.
[47] idem
[48] Martínez, Leonardo: Actualización Ficha del Batey, 2005
[49] Idem
[50] Idem
[51] idem
[52] idem
[53] Mudha, op cit, 2005
[54] Martínez, Leonardo: Op Cit
[55] Idem
[56] Idem
[57]López, Irene, De Moya Antonio: Rutas Migratorias De Haiti A Republica Dominicana: Implicaciones Para El Vih/Sida Y Los Derechos Humanos De Las Personas Infectadas. 1999
.
[58] CESDEM, Op. Cit.
[59] Copresida: Situación epidemiológica del VIH / SIDA en la República Dominicana, 1983 – Noviembre 2002.
[60]CESDEM, OP Cit, 2002.
[61]Coalición Probateyes, informe de identificación de casos de PVVS, Afectados y NHV, 2006.
[62] Martínez, Leonardo: Diagnóstico de Salud, Batey Bermejo, Don Juan, Construcción y sus entornos, 2005
[63] UNICEF, Proinfancia: Niños niñas y adolescentes en Situación de Riesgo a Causa del VIH / SIDA, Santo Domingo, República Dominicana, marzo 2004.
[64]Coalición Probateyes, informe de identificación de casos de PVVS, Afectados y NHV, 2006.
[65]CESDEM, OP Cit, 2002.
[66]CESDEM, OP Cit, 2002.
[67]Mudha, OP Cit, 2002.
[68]Coalición Probateyes, informe de identificación de casos de PVVS, Afectados y NHV, 2006.
[69]Coalición Probateyes, informe de identificación de casos de PVVS, Afectados y NHV, 2006.
[70]CESDEM, OP Cit, 2002.
[71]Idem
[72]Idem
[73]CREP, Estudio Socioeconómico del Batey, 1999..
[74] Tejeda Yangüela:Op cit 1999.
[75]Lopez, Irene, De Moya, Antonio: Op Cit, 1999

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